Santo Domingo. – El director ejecutivo de la Tecnificación Nacional de Riego (TNR), Claudio Caamaño Vélez, explicó que la República Dominicana no debería tener problemas de agua por la cantidad de lluvia que cae al año; por el contrario, debería estar en capacidad de exportarla a las islas del Caribe que no tienen ríos ni acuíferos.
Caamaño Vélez señaló que la cantidad promedio de lluvia a nivel mundial es de 800 milímetros, pero en República Dominicana la cifra ronda los 1,500. Recordó que la única zona del mundo que supera al país en pluviometría es la región amazónica en América del Sur, apenas por unos 100 milímetros.
El funcionario expresó que el país ha tenido una política ancestral de incrementar la disponibilidad de agua, en lugar de eficientizar la demanda, muestra de eso es que en la agricultura se usa el 82 % de toda la disponibilidad hídrica, pero se desperdicia cerca del 70 %.
El director de la TNR detalló que esto sucede porque apenas el 10 % de los campos de cultivos del país cuenta con sistemas de riego eficientes, mientras que el 90 % usa sistema de irrigación muy parecidos a los que trajeron los españoles hace más de 500 años.
Indicó que la tecnificación de riego ayuda a disminuir los costos de producción y a incrementar la productividad porque permite aplicar el agua y los fertilizantes con mayor precisión, lo que puede aumentar de entre 100 a 400 % la cantidad de productos.
Barreras en la tecnificación
Durante una entrevista en el programa “Distrito Informativo”, citó las tres barreras que han identificado para la tecnificación de riego: la cultural, la técnica y la económica.
Señaló que el aspecto cultural es el más difícil por ser un tema generacional, no obstante, reconoció que se ha ido rompiendo esa barrera sobre la base de que los productores saben que la tecnificación funciona, por lo que la TNR gestiona procesos de capacitación.
El sistema financiero dominicano es sumamente hostil en materia agropecuaria – sostuvo-, al tiempo de considerar que el país vive “de espaldas al campo” al no privilegiar la economía productiva como lo hace con la de servicios.
Para solventar el problema de financiamiento, recordó que, junto a la creación de la TNR, se ordenó la constitución del Fondo de Fomento a la Tecnificación del Sistema Nacional de Riego (FOTESIR), para gestionar los recursos necesarios para promover la optimización vía un esquema de bonificación a los productores.