La Tecnificación Nacional de Riego (TNR) socializó los planes de trabajo y capacidad de articulación para mejorar las infraestructuras de regadío de arroz vinculadas a la cuenca del río Yuna, en el marco de la visita técnica de una misión del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI), que junto a otras instituciones trabaja desde el 2020 en una intervención en la zona, con una inversión de US$150 millones.
El director ejecutivo de la TNR, Claudio Caamaño Vélez, abordó los lineamientos de acción de la entidad en una reunión en la sede del BID en el país, presidida por el jefe de Operaciones del organismo internacional, Gilles Damais, con quien coincidió en que cualquier intervención tendrá que hacerse respetando la biodiversidad de las zonas que serán impactadas.
También interactuaron sobre el alcance de la institución, el calendario de proyectos que se gestiona en la actualidad y la garantía jurídica del mecanismo de financiamiento no reembolsable a productores, que se maneja a través del Fondo de Fomento a la Tecnificación del Sistema Nacional de Riego (Fotesir).
Sobre la producción del cereal, Caamaño Vélez explicó que el esquema de producción actual del arroz consume alrededor de 40 % del agua que se destina en total a la agricultura, lo que representa más de un tercio del recurso disponible en todo el país.
Precisó que ese modelo cultural de producción es incompatible con los sistemas de riego presurizados en un mediano plazo, por lo que debe considerarse la implementación de la nivelación láser, cuyos valores de eficiencia rondan entre los 35 % y 50 %, implicando un ahorro de más de mil millones de metros cúbicos de agua al año a nivel nacional.
«Esto implica también un aumento en la productividad por varias razones: se puede tener mayor precisión en la aplicación de los insumos y mayor eficiencia en los costos para el productor, porque una parte de la superficie en los muros no suele sembrarse, al nivelar el terreno, podrá incorporarse a la producción», detalló.
Agregó que se promoverían tres cosechas de arroz por año, lo que tendría un impacto importante en la productividad, en especial ante una posible apertura del DR CAFTA.
El director de Tecnificación Nacional de Riego planteó que las juntas de regantes, además de gestionar el agua para riego, sean acompañadas con formación técnica para que ofrezcan servicios de nivelación láser y dotarlas así de capacidad de inversión, que aseguró se traducirá en una disminución en el costo para los productores.
La agenda de la mesa de trabajo, que fue encabezada el BID y el INDRHI, contó con la participación de representantes de los ministerios de Agricultura, Economía, Hacienda y Medio Ambiente, quienes abordaron la presentación de las implicaciones potenciales de la apertura comercial sobre la competitividad del cereal, la gestión costera, una síntesis de la misión sobre las propuestas de componentes y la definición de las consultorías necesarias para la formulación y ejecución del proyecto.